Cuando te falla un proyecto pedagógico con otro modelo de
educación (sin castigos físicos, por ejemplo) y la ciudad (o la moderna
civilización) te abruma, nada como regresar al pueblo natal, en este caso:
Concord en el estado de Massachusetts (USA). Y si además, uno siente la
necesidad de conocerse mejor a sí mismo, rehabilita una cabaña a la orilla de
la laguna de Walden, entorno idílico de íntimas resonancias literarias, donde
la esencia de la vida debe llevar a la felicidad; refugio austero por fuera y
por dentro, con las comodidades justas para poder vivir de lo que va y de lo
que viene: cama, cocina, mesa y tres sillas “la primera para la soledad, la
segunda para la amistad y la tercera para la sociedad”; retiro espiritual de
aislamiento y encuentro bien situado, a poco más de media legua de la casa
familiar que visita con frecuencia: ve a su madre y a sus tías, saluda a los
vecinos, compra libros y la prensa; y de vuelta a la tranquilidad del paraíso
se lleva bajo el brazo algún tentempié. Vivir en el presente, encontrar la
utopía en la realidad. Contradicciones nimias, minucias sociales que no
interrumpen la inspiración del inconformista.
Sentado en una canoa en medio del lago o paseando por el
bosque (elogio de los beneficios para el paseante, shinrin yoku en japonés),
libre de obligaciones, observa, medita, reflexiona, curiosea la fauna y la
flora, disfruta del placer de una vida sencilla que transcurre al ritmo de la
naturaleza. Guarda hojas secas en las páginas de un libro. Visita las
comunidades indígenas, aprende sus costumbres, aprende su idioma, aprende a
orientarse, aprende a pescar y a recolectar hierbas medicinales; los indios le
enseñan a reconocer el canto de los pájaros. Aprende que aunque no se posea
nada uno siempre es dueño de sí mismo, que cada uno es libre de emprender su
propio camino y que por encima de la ley están los seres humanos. Despojado de
prejuicios, de retrogradismos, de ideas preconcebidas que impiden evolucionar
al individuo, critica la sociedad capitalista, difunde el abolicionismo,
colabora con los movimientos antiesclavistas ayudando a los esclavos a escapar,
rechaza la guerra, desafía al estado (es arrestado por negarse a pagar
impuestos, considera un deber y un honor ir a la cárcel por no querer colaborar
con un gobierno que considera injusto) y desobedece a todo aquello que no
respeta los principios morales universales.
Naturalista, ecologista, objetor de conciencia, pacifista,
antimilitarista, voz de los derechos civiles, libertario, vegetariano,
escritor, filósofo, poeta, etc. Este comic biográfico es una muy buena senda de
entrada a la vida de un personaje universal y moderno. Sus páginas respiran
aire puro.