¡Están ahí!:
Se suprimen derechos, se merman avances sociales, se trampea
la ley, se privatiza la vida pública, se eluden responsabilidades. Depredan los
dineros de todos: rescatan a los ricos con el trabajo de los pobres (como está
mandao, como ha sido siempre, como debe seguir siendo). Nos humillan, nos
ordenan, deciden por nosotros; haréis esto, haréis aquello, haréis lo otro.
Sermonean, salmodian, predican.
Más astutos que inteligentes, más ambiciosos que aptos, más
corruptos que honestos; fieles a su marca, completamente decididos a imponer el
producto que venden; ¡están ahí!, acechando a plena luz, aprovechando el
conformismo de los súbditos, la indolencia de la soberanía democrática, las
leyes de la mentira impune.