domingo, 23 de octubre de 2011

LEIF GW. PERSSON; “EL DECLIVE DEL ESTADO DEL BIENESTAR”.

Antes de tomar la salida evitemos confusiones, el título puede inducirnos al error de pensar que estamos ante la publicación de un juicioso ensayo sobre las consecuencias sociales de la crisis económica en los estados democráticos de la vieja Europa; nada de nada, el genérico enunciado engloba a una trilogía de novelas de intriga suecas…¡¿Más literatura policíaca nórdica?!...¡¿Otro Stieg Larsson?!...¡¿Qué hay de malo en ello si se ejerce bien el oficio y la obra lo merece?! Además, sobra recordar, aunque son autores que comparten paisaje y paisanaje escandinavo con algunos puntos temáticos en común, cada cual calza zapatos según estilo y gusto; en la presente ocasión Persson se sitúa más cerca de la línea de los Le Carré que de los Larsson, Fossum, Marklund, o la pareja clásica Sjöwall y Wahlöö.
 
Mil novecientas tres páginas divididas en número desigual en tres volúmenes nombrados con los siguientes encabezamientos: Vol.1: “Entre la promesa del verano y el frío del invierno”. Vol.2: “Otro tiempo, otra vida”. Vol.3: “En caída libre, como en un sueño”. Ambientados en los últimos 25 años de la historia sueca del siglo XX (aproximadamente el periodo comprendido entre el año 1975 y el año 2000), y por vecindad geográfica con la historia de la Europa del Este; dos décadas y media en las que se cae el muro de Berlín, se deshace el Telón de Acero, se derrumba el Imperio Soviético, aparecen y desaparecen países, se quitan y se ponen fronteras. Un guirigay geopolítico propicio para sacar tajada; burócratas de los servicios secretos del antiguo bloque comunista se llevan por la patilla archivos confidenciales con información suspicaz e importante: colaboracionistas, simpatizantes, espías, etc; la extorsión abre su mercado (de algo hay que vivir), el KGB y la Stasi venden, la CIA compra. Suenan nombres y apellidos, altos cargos del estado sueco relacionados en su juventud con delitos de terrorismo y la sospecha sobre un Primer Ministro que… A las 23,21 de la noche de un viernes 28 de febrero de 1986 en una calle céntrica de Estocolmo es asesinado de un tiro por la espalda Olof Palme, político socialdemócrata, en ese instante Primer Ministro de Suecia. Personaje controvertido, amado u odiado sin término medio, cuyo homicidio da origen al llamado “Caso Palme”, quizás el hecho histórico más relevante acaecido en la etapa moderna del estado sueco desde la postguerra hasta la actualidad. Se buscan los motivos políticos o ideológicos, se analizan mil pistas (la pista de los kurdos, la surafricana, la iranoiraquí, la yugoslava) la de acá y acullá; recaen las sospechas sobre cabezas patrias (el ejército, la policía, los servicios secretos, la ultraderecha nacionalista); surgen, la mayoría de ellas sin fundamento parcial o total, las teorías de la conspiración que ponen su punto de mira en las esferas más respetables y sólidas de la sociedad sueca. Se abre un caso trillado, investigado una y otra vez mirando todos los ángulos imaginables, analizado al detalle; el mayor fiasco en los anales de la policía sueca. Un caso abierto, irresoluto al que referirse como mala praxis en la investigación es simplificar la incompetencia, la torpeza, la falta de medios y preparación policial, el desinterés, la corrupción y la estulticia política.
Los pecados del pasado reclaman penitencia en el presente, las traiciones venganza y las heridas abiertas supuran bajo las vendas que las ocultan. Las personas no son hologramas, dejan sus huellas, sus amores y desamores, sus aciertos y fracasos, sus vicios y virtudes; sucumben a la seducción del poder y el dinero o cumplen honradamente con su trabajo imponiéndose a la apatía de lo cotidiano, a la desconfianza de sus superiores y el descontento de sus compañeros.

Realismo social salpimentado con notas de humor corrosivo e ironía satírica sin excesos. Policíaco absorbente sostenido sobre una trama política que saca los colores a una sociedad que parecía modelo de progreso y eficacia, y a una administración ejemplo de diseño moderno, limpio y aseado necesitada de depurar sus cloacas.

martes, 18 de octubre de 2011

MICROPOEMA (34)

Hacen demasiado ruido los hombres
con impertinencia
para que salgan
esta noche
a pasear las estrellas.

lunes, 10 de octubre de 2011

APOTEGMA (37)

El pragmatismo injuria a la utopía para someterla.

lunes, 3 de octubre de 2011

ROBERT FISK; “LA GRAN GUERRA POR LA CIVILIZACION”.

Definida la palabra civilización como el “conjunto de ideas, creencias religiosas, cultura, artes y modos de vida de un pueblo”, ¿hay civilizaciones superiores e inferiores?, ¿cuáles son los principios que determinan que una civilización sea considerada superior o inferior?; admitiendo que las haya ¿es civilizado imponer una civilización sobre otra mediante el uso de la guerra? Guerra, ese es el leitmotiv: guerra justa, guerra al terror, guerra del bien contra el mal, guerra de ellos o nosotros, guerra por la libertad, guerra por la democracia; clichés que imponen una visión del mundo sesgada, maniquea y hurta un debate honesto sobre las políticas internacionales de Occidente; se establecen con la ayuda de la manipulación mediática consciente o inconsciente, la retórica competente o incompetente acomodada en el conformismo periodístico que ignora el contexto histórico, el porqué del presente y los temas claves del conflicto de Oriente Medio; a saber, enumerando: genocidio armenio, creación del estado de Israel, guerras árabes-israelíes, contienda israelí-palestina, revolución iraní, guerra Irán-Irak, campamentos de refugiados palestinos en Líbano, Siria, Jordania y Cisjordania, invasión soviética de Afganistán, guerra del Líbano, guerra civil argelina, invasión de Kuwait, guerra del Golfo, atentado de las Torres Gemelas, guerra de Afganistán, invasión de Irak, … Guerras, conflictos, invasiones, terrorismo, atentados suicidas, violencia sectaria, represión, daños colaterales de políticas hipócritas, traiciones, engaños y mentiras. Avalancha de hechos sangrientos, similares, a veces repetidos hasta la náusea durante décadas en una parte del mundo sumida en la injusticia y el sufrimiento de miles de personas inocentes, vidas destrozadas que como cualquier hijo de vecino también desean la paz, la libertad, la justicia, la democracia, el progreso e incluso liberarse de la tutela, los mezquinos intereses egoístas y los regímenes corruptos que amparan las potencias occidentales. Los grandes amigos de ayer (Saddan Hussein, Bin Laden, Gadafi, etc), según soplen los vientos de la política internacional, son los terribles enemigos del hoy. Se reescribe la historia con renglones torcidos.
 
    Treinta años pateándose el intrincado escenario geopolítico de Oriente Próximo, captar la atmósfera, tomando el pulso (como se suele decir), si se tiene el oficio, la sensibilidad, el coraje y la inteligencia suficientes dan para escribir un testimonio periodístico colosal, una crónica sobrecogedora narrada con la emoción de la vivencia del testigo ocular; memoria personal del corresponsal de guerra lúcido, del viajero atento, del observador comprometido con su tiempo que expone con nitidez su postura sin rehuir la polémica, muy al contrario la fomenta si para ello no tiene que renunciar a llamar a las cosas por su nombre; no teme nombrar a los asesinos, señalarlos y denunciarlos, da voz a las víctimas, toda la voz para las víctimas nunca en igualdad con los verdugos (se debe informar desde la perspectiva de las víctimas) y ataca a los medios de comunicación por su supuesta objetividad en el control del poder y los centros de poder. Historia al pié del cañón que aporta claves imprescindibles para entender un conflicto que ha marcado el siglo XX y puede marcar el XXI, un problema de difícil solución. Denuncia sin paños calientes la obscenidad moral que supone usar la guerra como opción política, violando leyes internacionales, pisoteando derechos humanos, considera el autor la guerra como “el fracaso total del espíritu humano”; intereses de la devastación, el odio y la tergiversación deshumanizada de un crimen cotidiano contra la humanidad. Análisis de las causas, consecuencias y responsabilidades de los estados occidentales (EE.UU a la cabeza) en esta tragedia. Ensayo crítico, valiente y esclarecedor. Obra magna, de imprescindible lectura (tirando del tópico) para todo aquel que desee conocer lo que está ocurriendo en una parte del mundo donde la locura humana amontona el horror sobre el horror, en un parte del mundo, de nuestro mundo, cuya sombra tenebrosa nos alcanza a todos.